Entre estas dos fotos solo hay un par de kilometros. La foto de arriba es de una zorra adulta, la de abajo la de un zorrillo, seguramente nacido en primavera. Me imagino que el zorrillo se escaparia y la madre lo estaria buscando, en ese tramo de la carretera no habia salida por ningun lado, alambrada a la derecha, el embalse de a la izquierda, una trampa mortal. Estos animales sin son autoctonos y el coche que los mato, tambien.
Hola!!!
ResponderEliminarNo sé si serías tu uno de los dos bicigrinos que nos encontramos a la vuelta de nuestro entrenamiento. El regreso del Cruce de las herrerias lo hicimos por la N-630.
Había un bicigrino parado en una de las pocas sombras que esta carreterita ofrece, con un chaleco amarillo al que Paco le preguntó si tenía algún problema y poco después más cerca de Proserpina nos encontramos a otro pedaleando. A mi me hubiera gustado parar, pero Paco iba muy agobiado por la caló que hacía y porque se nos había perdido la bomba de inflar entre los pedregales y arenales del camino y sólo pensaba en llegar a Mérida.
Si eras tu alguno de ellos, mil perdones por no parar, pero la verdad es que la caló tampoco ayudaba mucho. Creí que te encontrariamos más tempranito.
Nosotros también vimos algún que otro bichito muerto.
Un saludo
Yo opto por dos zorros que se han cruzado por la carretera, quitemosle miga al drama familiar.... ademas seguro que perseguian a un indefenso conejo padre de familia que un conductor solidario salvo. Besos
ResponderEliminarSe admiten versiones sobre la triste muerte de los dos zorrcs. Una cosa es cierta, en la parte de la carretera donde estaban, no habia escapatoria en ninguno de los lados.
ResponderEliminarIsabel, Paco, si era yo el pringao sudoroso con un chaleco naranja y os recuerdo perfectamente. Que lastima que no llevara el maillot bicigrino, pero es que hacia mucho calor y si no fuera por seguridad, no llevaba ni el chaleco...a pelo
ResponderEliminarBueno, ya veo que estás en Salamanca capital, pero cuelga más fotos hombre!!!, me aburro ya de ver al pastor y los zorros muertos.
ResponderEliminarYa que estás allí pásate por la universidad, a ver si ves a la rana de la fachada, si la ves, tienes que pedir un deseo.
Besos
Uff en que estaría pensando, es cierto que el chaleco era naranja jajajaja y no amarillo!!
ResponderEliminarPues la verdad es que es una pena que no parasemos a pasar una poquita de caló juntos.
Muchas fuerzas para el resto del camino
Un saludo